Encontrando la determinación para superar las luchas académicas
Daniel Gray rechazó dejar un difícil primer semestre en la Universidad de Illinois en Chicago (UIC) demorar su sueño de graduarse de la universidad.
Se enfrentó a un curso de cálculo difícil — por cual sus cursos de matemáticas en la secundaria no lo habían preparado bien— y estrés financiero.
Pero fue su tenacidad que le ayudo a superar sus retos y a su graduación de diciembre — con un trabajo en Boeing esperándolo en Seattle a partir de enero.
“Hay un montón de otras personas que son naturalmente más inteligentes, pero no solo hace falta inteligencia, se necesita determinación y muchas ganas para lograrlo”, dijo Gray, un estudiante de cuarto año en ingeniería mecánica. “Lanzo mi cabeza contra la pared y, eventualmente, lo logro. Sólo tienes que seguir adelante”.
Enfrentó a desafíos financieros durante su primer semestre y no pudo encontrar un trabajo estable, por lo que tomó trabajos impares paseando perros y cuidando a niños para ganar algún dinero extra mientras abordaba sus tareas desafiantes.
“Fue un nuevo ajuste para aprender material que era complicado e intrincado y tomar un examen en el tiempo dado. Completamente no estaba preparado”, dijo. “Me dije que no quería renunciar o ser derrotado por una clase. La superación de ese desafío fue satisfactorio”.
Encontró ayuda para sus luchas académicas a través del programa “Reclutamiento de Minorías en la Ingeniería y Programa de Retención” de la UIC. Sus estudios mejoraron a través de tutorías regulares.
“Encontré mi sede en campus allí”, dijo.
Todo su tiempo en esa oficina no pasó desapercibido, de hecho, líderes del programa le ofrecieron un trabajo, que le ayudó a superar su estrés financiero.
“No puedo estar lo suficientemente agradecido de ese programa”, dijo.
Gray encontró otras oportunidades a través de su participación con la Sociedad Nacional de Ingenieros Negros. A través de redes y ferias de empleo en las conferencias de la sociedad, Gray fue contratado para pasantías en Toyota y Ford.
Esas prácticas alinearon con su pasión por los coches, un interés que lo llevó a su licenciatura de ingeniería mecánica.
“Siempre he tenido un gran interés y curiosidad con los coches y eso comenzó jugando con “Hot Wheels” y “Legos” con mi hermano pequeño,” dijo. “Ha sido un gran interés mío hasta donde logro recordar”.
En Toyota, formó parte de un equipo de desarrollo de producto que diseñó un método para medir la carrocería entre procesos de pulverización. Las prácticas eran serviciales, él dijo, pero encontró una mejor opción en la Ford, donde creó un aparato que mide el recorrido de las ruedas en relación con el cuerpo del vehículo, entre otros proyectos.
“Tomé lo que aprendí en Toyota y me dio hasta más ganas para el trabajo, siendo más directo pidiendo ayuda o más proyectos”, dijo. “Fue una experiencia increíble. Aprendí mucho sobre mí y ayudó a ampliar mis horizontes sobre lo que quiero hacer”.
Conectó con su futuro empleador, Boeing, a través de la Sociedad Nacional de Ingenieros Negros. A partir de enero, será un ingeniero de diseño estructural, trabajando en el equipo de alas para el avión comercial más reciente de la empresa.
“El hecho de que trabajaré para una empresa como la Boeing y mudándome a través del país realmente sigue siendo un choque, estoy emocionado y nervioso. Tantos sentimientos”, él dijo.
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